La educación musical se transformó en el siglo 19 con la creación de las academias profesionales en ciudades como Paris y Londres. Hasta entonces, la música se enseñaba en las iglesias o como una práctica familiar. Durante el siglo 18 se volvió más común que los músicos también dieran lecciones particulares a los miembros de las clases altas, especialmente a las mujeres, como medio de sustento personal. En Santafé, por ejemplo, músicos como Juan Antonio de Velasco y Joaquín Guarín ofrecían lecciones de canto, piano y guitarra. La primera escuela de música de la Nueva Granada se creó en 1833, en el Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario, en donde se ofrecían clases de canto, piano, violín, guitarra y flauta. 

La Academia Nacional de Música se inauguró en 1882, siguiendo el modelo de las instituciones profesionales europeas, en el antiguo convento de Santo Domingo. Su fundador fue Jorge W. Price, hijo de Henry Price, el creador de la Sociedad Filarmónica. Allí se dictaban clases de teoría de la música, violín, viola, violoncello, contrabajo, clarinete, flauta, corno, trompeta y trombón y desde 1892 comenzó a otorgar un diploma profesional. En 1887 se empezaron a ofrecer también clases para mujeres en la “Sección de señoritas.” La academia también importaba y producía textos guías que eran traducidos y adaptados por los profesores.

Para 1892 se habían fundado escuelas de música como la Academia de Música del Tolima y otras en Santa Marta, Tunja, Medellín y Cartagena, algunas de estas dirigidas por ex alumnos de la Academia Nacional de Música. En 1910, bajo la dirección de Guillermo Uribe Holguín , la Academia Nacional de Música se convirtió en el Conservatorio Nacional de Música, el cual se anexó en 1936 a la Universidad Nacional en Bogotá, donde continúa hasta el día de hoy.

Price consideraba que la tarea de la Academia era no solo educar a los músicos y compositores sino también a la audiencia. Así, la Academia ofrecía conciertos públicos con fantasías, selecciones de óperas de compositores italianos del bel canto como Rossini, Giuseppe Verdi y Gaetano Donizetti así como obras más exigentes de Joseph Haydn , Wolfgang Amadeus Mozart , Ludwig van Beethoven, Frédéric Chopin y Felix Mendelssohn.