La sección de vientos de cobre se compone de trompetas, cornos, trombones, y tubas. Son los instrumentos más sonoros de la orquesta. Su sonido se produce al hacer vibrar los labios contra una boquilla cónica de metal que a su vez hace vibrar el aire en el interior del instrumento. En cada posición de las válvulas o el tubo (en el caso del trombón) se producen varias alturas de acuerdo a la posición de los labios o embocadura y la velocidad del aire. Todos los instrumentos de la familia tienen antecesores muy antiguos que carecían de boquillas y válvulas, hechas de caña, cuernos, caracoles, o colmillos de elefante. Los instrumentos modernos están fabricados de cobre, lo cual permite doblar y enroscar el tubo de varias maneras.

La trompeta es el instrumento más alto de la sección de cobres. Tiene un sonido brillante, fuerte y penetrante. Tiene un sistema de tres pistones, inventado hacia el siglo 19, que conecta varias secciones del tubo para cambiar la longitud de la columna de aire.

El corno tiene un timbre más oscuro y grueso que la trompeta y ocupa un registro más bajo. Su sonido puede ser romántico y misterioso o áspero y duro, que recuerda el sonido de sus antepasados, los cornos de cacería. Los acordes producidos por varios cornos tocando juntos tienen un timbre especialmente lleno. Tiene un sistema de válvulas similar a la trompeta que le da un rango muy amplio.

El trombón carece de válvulas, y la altura de las notas se controla con la vara que se puede extender o acortar. Su sonido es menos brillante que la trompeta pero es muy expresivo, similar a la voz humana en el registro alto y capaz de lograr sonidos muy poderosos en el registro bajo. Aunque su antecesor directo (un instrumento similar pero más pequeño llamado sacabuche) data del siglo 16, el trombón moderno sólo comenzó a hacer parte de la orquesta desde finales del siglo 18, inicialmente en la orquesta de teatro. La familia del trombón también incluye el trombón bajo y el trombón de pistones, pero estos últimos son más frecuentes en las bandas de vientos y orquestas de baile que en la orquesta sinfónica.

La tuba es el instrumento más grave de la sección de cobres; es el menos flexible y es poco empleado como instrumento solista. A diferencia de la trompeta y el corno, no tiene antepasados directos entre los instrumentos de metal sin válvulas, sino que se inventó para reemplazar el serpentón y el oficleido, que sirvieron de bajo en la sección de vientos hasta el siglo 19. 

La familia de la tuba incluye la tuba bajo, contrabajo, y tenor, también conocida como eufonio o bombardino, y también el melófono y la tuba wagneriana. De estos instrumentos, todos más pequeños que la tuba, sólo la tuba wagneriana, emparentada con el corno, suele incluirse en la orquesta cuando se ejecutan las composiciones de Richard Wagner, su inventor.

Los instrumentos de la sección de viento cuentan con varios tipos de sordina que permiten modificar su timbre. Las sordinas son hechas de metal, plástico, o caucho, y funcionan al reducir la cantidad de armónicos que salen de la campana del instrumento.